miércoles, 7 de noviembre de 2012

Mataron al vecino



Es triste y quizás vergonzoso admitir que aquí en este sector, la mayoría de nosotros los habitantes conocimos a alguien que fue asesinado de forma violenta. Siendo casi siempre la principal causa de muerte, disparos con arma de fuego.

Aunque pensándolo bien, no solo en este sector (Zona 18 Guatemala) podemos alardear de tan nefasta realidad, para empeorarlo aun más, creo que en muchos otros sectores de Guatemala es algo común haber conocido a una persona para luego enterarse que lo perforaron a bala.

Poniéndome como ejemplo, diría que perdí ya hasta la cuenta de cuantas personas he conocido y que luego me doy por enterado en el periódico, la televisión, radio o el tradicional pero no menos efectivo chisme de que fulano o fulana fue baleado en este o aquel lugar, por aquello o esto otro. Si, las causas varían, es una maraña de circunstancias las que rodean muchas veces a un asesinato y como rara vez las autoridades logran dar con el o los asesinos, no queda más que resignarse y saber que la persona en cuestión, ya no será vista más.

Hace apenas dos o tres días, comentábamos con mi esposa lo difícil que debía ser para nuestro vecino del apartamento de arriba, tener que lavar su propia ropa, llegar de trabajar y quizás tener que preparar alguna comida mal improvisada y demás cuestiones que tocan afrontar cuando la mujer te deja... machismo o feminismo aparte, el punto es que fácilmente te imaginas lo triste que ha de ser encontrarte solo y tener que hacerlo todo tu mismo.

Por cuestiones de trabajo me ha tocado levantarme de madrugada últimamente, y lo he escuchado restregar su ropa en el lavadero, para poco más tarde salir para el trabajo. La verdad, nunca me había detenido a intentar conocerle mejor, de un buenos días o buenas noches no pasamos, lo poco que sabemos de su vida lo hemos escuchado de algún  otro vecino entrometido que nunca falta.

En una de las redes sociales más populares, leí el estado de un amigo, lamentando el asesinato de un chofer de "tuc tuc", sin imaginar que era este mi vecino el que abría sufrido el atentado que le segó la vida.

Dejando atrás a un hijo de pocos años, a familiares y amigos, el tuc tuc que día a día usaba para ganar el sustento y le llevaba y traía a su lugar de reposo, todo eso quedo atrás, lo mismo el tener que lavar su propia ropa o prepararse su comida, en parte es triste pensar en ese tipo de cosas, era una persona muy joven y no aparentaba ser malo, al menos no más de lo que puede ser cualquiera .

Pasa uno que otro mal recuerdo por la cabeza, imaginando el dolor que han de estar pasando sus familiares, sobre todo su señora madre que al parecer aun vive, de las causas del porqué fue asesinado, sobra decir que poco se sabe y lo más probable es que sea una más de esas historias sin concluir en donde hay muchas hipótesis y versiones, pero que al final nada dejan claro.

Los "tuctuqueros" como les dicen tiene mala fama, la mayoría son jóvenes adolescentes con malas fachas para algunos, de modales escasos y con mala actitud, doy fe de que son muchos los que caben en esa descripción, pero no son todos.  Ya sea que fuera por voluntad propia o de forma forzada se les ha vinculado muchas veces con las pandillas y el cobro de extorciones, han habido épocas en las que matan a varios de ellos en un lapso corto de tiempo.

Algunos dicen que es mala idea trabajar en ese negocio, que ya se sabe del peligro que se corre  y demás, pero en un país en donde las oportunidades de empleo son cada día más escasas y en donde los padres poco se preocupan por educar bien a sus hijos y hacer todo lo posible por alejarlos de la calle y las malas amistades o influencias, hay poco de donde escoger, cuando no se tienen estudios avanzados y no tienes una visión clara, ejemplos y motivaciones, hay pocos oficios a que dedicarse.

Ya fue velado y enterrado, seguirá siendo extrañado y llorado por quienes lo amaron, pero es duro pensar que quizás hoy mismo otro joven ya está ocupando su lugar, y ser uno más de los tuctuqueros.

Tuctuc